La identidad corporativa de una empresa es la forma en la que se proyecta y comunica una organización con sus grupos de interés, es decir, cómo transmite su propósito y propuesta de valor. Normalmente, cuando hablamos de identidad corporativa hacemos referencia a la identidad visual de una empresa, es decir, a la representación física de la marca corporativa. Todo esto incluye los códigos y signos que identifican a una empresa, ya sea el logotipo, símbolo o anagrama, su paleta cromática, el estilo ilustrativo y de pictogramas, etc. También, la manera en que todo esto se conjuga y se aplica en los diferentes soportes de comunicación de los que dispone la empresa.
La verdadera clave está en construir un estilo visual cohesionado por medio del cual la empresa pueda ser reconocida en el mercado, más allá de que contenga su logotipo y esté correctamente aplicado.
¿Por qué tener una identidad corporativa?
Una vez compuesta la identidad visual de la marca, es fundamental una definición clara de ese patrón de comportamiento para que el cliente, los socios y colaboradores sepan qué esperar de la compañía.
Empresas que cuentan con un discurso, pero en la práctica actúan de un modo contrario, pueden perder la confianza del público definitivamente.
Por ejemplo, si una organización tiene un discurso a favor de la preservación ambiental y prácticas ecológicas, pero luego se asocia con compañías reconocidas como contaminantes, el público cuestionará ese comportamiento.
Las nuevas tendencias en los hábitos de consumo hicieron que la relación entre la empresa y el cliente fuera un aspecto importante para la fidelización del mismo y para mantener un equilibrio en las ventas, ya que la base fija de clientes concierta una parte importante de las finanzas de una empresa. Estas relaciones hicieron que los consumidores comenzaran a pedir determinadas posturas de las compañías con las que interactúan, siendo la identidad corporativa un factor relevante para dirigir esa relación.
¿Cuáles son las principales características?
Cuando queramos elaborar nuestra propia guía de identidad corporativa, se tienen que considerar diversos aspectos, entre ellos, las prácticas diarias existentes en la empresa para evitar algunos malentendidos, como la falta de sincronización entre propuesta y ejecución. Otros factores subjetivos que tienen que estar presentes en la identidad de la empresa son:
Diferenciación
La propuesta de nuestra empresa debe distinguirse de la competencia y atraer la atención del público objetivo por nuestras acciones.
Coherencia
Las contradicciones entre discurso y práctica son un riesgo, por lo tanto, la identidad debe salvaguardar las características de la empresa y su forma de actuar.
Relevancia
La relevancia de la empresa para su público objetivo incluye crear un concepto acorde con lo que el público busca de la compañía.
Reputación
La reputación no surge de forma instantánea y debe ser construida a lo largo del tiempo. A partir de una guía sólida que cuente con los tres elementos anteriores, la compañía tendrá varias oportunidades para solidificar una imagen positiva entre su público objetivo.
Diferencia entre imagen e identidad corporativa
A pesar de que muchas personas utilizan estos conceptos como si fuera lo mismo, no lo es. Es importante conocer las principales diferencias entre imagen e identidad corporativa. La principal diferencia radica en que la identidad corporativa se refiere a la identidad visual que construye una empresa en si misma, mientras que la imagen corporativa se refiere a la percepción externa que tienen los consumidores del producto o servicio de una empresa.
IDENTIDAD CORPORATIVA | IMAGEN CORPORATIVA |
Colores de la marca | Representación visual |
Tipografía | Emociones asociadas a la marca |
Logotipo | Impresiones de la web |
Guía de diseño | Valoraciones |
Tono del mensaje | Reputación por acciones |
¿Cómo crear una identidad corporativa?
Para crear la identidad corporativa de una empresa es necesario saber bien qué es y los valores de los que debe disponer una empresa. Sigue los pasos que proponemos a continuación. Si consigues mantener una uniformidad en los mismos lograrás tener una imagen de marca sólida y duradera.
- Historial de marca
Cada persona desarrolla la propia identidad basada en la historia de vida que tiene. Con las empresas es exactamente lo mismo. Una compañía u organización solo puede adoptar un discurso acorde a su historia.
Al identificar, pero no crear las motivaciones fundamentales de la marca, esta identidad se irá construyendo poco a poco, en armonía con el mensaje emitido.
- Identidad visual
La identidad visual es un aspecto fundamental de la empresa, ya que el diseño y los recursos visuales van a representar el mensaje que la compañía quiere transmitir.
Entre los elementos que componen la parte visual, se destacan:
- Logotipo
El logotipo es un símbolo creado que representa de forma visual los valores de la compañía.
Los expertos en la creación de logotipos recomiendan que sea sencillo y claro para que el mensaje sea de fácil comprensión por parte del receptor.
El logotipo de marca puede estar relacionado con un dibujo o con la marca escrita; independientemente de la elección debe tener un significado propio.
Por otro lado, recomendamos disponer de variaciones del mismo, por ejemplo, sobre fondo negro, blanco, en horizontal o vertical, etc.
- Paleta de colores
La gama de colores no solo incluye en color del logotipo, sino los colores y tonos que podrán ser utilizados en todos los elementos relacionados con la empresa, ya sea material gráfico, online, incluso en la estructura física del negocio.
Lo más habitual es que esta paleta de colores incluya de dos a cuatro colores primarios y entre ocho y doce secundarios.
Todos los elementos de la empresa deben cumplir esas especificaciones, pues la variación constante de colores utilizados puede provocar que no se identifique la identidad visual de la marca.
- Tipografía
La tipografía consiste en las fuentes que van a ser utilizadas. Normalmente, solo se seleccionará una fuente, que debe ser clara para poder usarla en materiales impresos, digitales, de diferentes colores, etc.
Es común seleccionar solo una fuente, pero se debe considerar si es visualmente clara para ser usada en materiales impresos, digitales, en diferentes colores, etc. Algunas organizaciones optan por seleccionar dos o incluso tres fuentes por si la primera no se encuentra disponible.
- Público objetivo
A la hora de elaborar la identidad de una empresa, se debe tener en cuenta el público objetivo o buyer persona que se busca alcanzar.
No se utilizará el mismo mensaje ni será la misma identidad visual si el público objetivo son jóvenes de hasta 25 años, que personas de más de 50.
La adecuación de la identidad a tu público objetivo influirá en la coherencia del mensaje y también en la construcción de la reputación.
- Lenguaje
Otro aspecto con bastante relevancia a la hora de crear la identidad corporativa de una empresa es el lenguaje, que debe ser adoptado a su público. Ya que no solo se utilizará en materiales publicitarios, sino en toda la comunicación empresarial. Tanto en la relación con clientes y colaboradores como en las elecciones mercadológicas, etc.
- Tono de la comunicación
El mensaje a transmitir y el tono son los elementos finales que constituyen la identidad corporativa. El mensaje se relaciona con la visión, misión y valores de la empresa. Estos aspectos serán fundamentales para enfocar las acciones en diferentes sectores del negocio.
Por ejemplo, el mensaje puede ser más formal en función del perfil de la empresa, o inclinarse por la informalidad.
Si no dispones de tiempo o recursos para elaborar una buena identidad corporativa para tu empresa, ponte en manos de profesionales. En enmarkados somos expertos en branding y soluciones corporativas. ¿A qué esperas para cautivar y fidelizar a tus clientes?